Recuerdos, sabores y lugares

dissabte, de desembre 03, 2005

El cazabe lo probé por primera vez hace más de 20 años selva adentro, cuando aún tenía la osadía de viajar por Colombia escudado exclusivamente en el amor al país, a sus selvas, a sus ríos, a sus indios.

El suero costeño lo conocí gracias a Gustavo Caamaño (QEPD), en una de esas remesas mensuales que su mamá le remitía desde El Banco -Magdalena-, y que aderezaron largas jornadas de estudio del comportamiento del silicio dopado con arsenuro de galio.

A este boyaco, que se considera paisa por adopoción gástrica, y que es cliente decembrino del Cartel de la Papa Criolla en el Mercat o de la Boquería, se le había olvidado añorar esos exóticos sabores, preso como está de la tan cacareada dieta mediterránea y de los restaurantes de diseño de la cosmopol·lita Barcelona.

Fue una maravillosa sorpresa encontrarme un sencillo pero espectacular maridaje: Cazabe con suero costeño.

Y hay más, muchísimo más en Mini-mál, un restaurante en el Chapinero bogotano, que ha hecho una apuesta creativa y valiente por la comida de lugares tan diversos como olvidados: el Chocó, el bajo Sinú, la Orinoquía, la Guajira y la Amazonía.

Porque la cultura gastronómica colombiana no se limita solo a la carta de Casa Vieja, El Palacio del Colesterol, Club Colombia, Caldo Parado, El Corral o Crepes & Wafles. También hay una cocina indígena y negra, con una calidad y diversidad que bien vale la pena rescatar y recrear. Mejor dicho, hay que ir a Mini-mál.

Mientras tanto ruego porque cuando vuelva a Bogotá todavía esté funcionando. Yo me lo he traido en el recuerdo, porque en la maleta no cabía nada más.



Restaurante Mini-mál
Cocina contemporánea sorprendentemente colombiana

Cra 4 A No. 57-52
Chapinero Alto

Tel: 347 54 64

Horario
Lun-Mie: 12:30 a 22:00
Jue-Sab: 12:30 a 24:00

Imprímase y cumplase

1 comentarios:

Anònim ha dit...

Tomo nota (estoy tomando muchas) para mi próxima visita.

Que la espero en breve. Veremos.