Realmente no tengo ganas de discutir. Sobre todo con argumentos tramposos y maniqueos como los que ha usado mi querido amigo Jorge Perfontan.

Tramposos porque pone en boca o en mente de otros lo que él quiere decir y no lo que el interlocutor dice explícitamente. Yo no quiero tener la razón, pero al menos creo que tengo el derecho a hablar por mi mismo, y no por lo que Jorge cree que tengo que decir para que el tenga la razón. Así el diálogo se queda en monológo, pero de besugo bipolar.

Y digo maniqueos porque Jorge no distingue grises, ni circunstancias, ni lugares. El embiste. Así por ejemplo duda de que en Medellín, Colombia, una de las ciudades más violentas de Sur América, un servicio de este tipo sea necesario.

Pero como soy todo un caballero, he de reconocer que en algo ha acertado Jorge: Soy analfabeto funcional. Y ya que él no ha tenido tiempo para suponer la causa, la confieso: Leer con el burka los manifiestos en farsi de la Yihad Radical Feminista es imposible. A duras penas puedo hojear la revista Hola que viene en el asiento trasero del Pink Taxi.

Mientras él vocifera "Lugar común" y luce su "incorrección política" de caca, culo, pedo, pis, yo estoy dispuesto es a desmontrar la estructura dialéctica del discurso tras el cual ha operado.


Lo haré en tres partes:
  1. Una anécdota. Con personajes reales que él mismo conoce. Tal vez ver la paja en el ojo ajeno le facilite ver la viga, que él orondo porta en este caso en el suyo.
  2. Un antecedente. Una columna de la siempre indignada y tinturada señora Rahola, en la que repite la falacia argumental.
  3. Una autopsia del mecanismo discursivo. Para lo cual acudiré a deliciosos cadaveres cedidos gentilmente por los más insignes manipuladores ibéricos.
No sé que efecto le puedan causar a Jorge estas argumentaciones. Deseo fervientemente que después de leerlas rectifique para que el color amarillo pollito de su pelo desaparezca. Sinceramente no le luce y ya empieza a afectarle el cortex cerebral.

Aunque uno nunca sabe, de pronto por arte del birlibirloque nos podemos sorprender al ver a Pilar Rahola en Els Matins de TV3, no con una viga en el ojo, sino con una viga en el lugar de la nariz. En cuyo caso ni yo, ni Jaume Roures asumimos responsabilidad* alguna.

*También cedemos los derechos de transmisión del milagro a La Noria.


Imprímase y cumplase

2 comentarios:

Anònim ha dit...

Pues si. Voy a leer atentamente las tres partes, por ser quien eres, porque eres mi amigo y después de este rifirafe dialéctico y nutritivo seguirás siéndolo, seguro.
Pero antes pongamos las cosas en su sitio:

1.- "Argumentos tramposos y maniqueos". Por los dioses Mauro, lo primero que se ve en tu artículo es unas pobres mujeres con burka hasta los empeines. ¿Eso no es manipulación?, no pienso entrar en algo tan burdo. Ni siquiera pienso darte el gusto de decirte que me parece una barbaridad porque es evidente. Mi discurso, aunque no lo creas no es contra las mujeres, es contra la estupidez manifiesta en este puto pais de analfabetos (y no te incluyo) en el que políticos sinvergüenzas hacen una ley a favor del colectivo femenino X, que saben que no podrán cumplir, un discurso suavón y después se fuman un puro encantados de conocerse.

2.- Sigues con tu contumaz acometida (ah no, que el de las acometidas soy yo...) mezclando, en negrita, términos como Yihad, Radical y Feminista. O sea o estoy con la estupidez del Pink Taxi o me gusta lapidar féminas, sin término medio, jooooooder. Y hablas en primera persona del burka, ¿cuantos has llevado Mauricio?

3.- ¿Medellin?, ¿Allí es necesario ese servicio?. Ni idea, porque yo estoy hablando de Barcelona que es la ciudad que conozco. Sigues manipulando a tu antojo, pero no te culpo, para eso es tu blog. Mezclas churras con merinas desde tu púlpito de forma artera y a conciencia.
A propósito , no explicas por qué allí es necesario...

4.- Mi incorrección política no es de caca, culo, pedo, pis. Es la mia y ya está, y creo que te he dado mis razones. No es bueno intentar ridiculizar a alguien que no piensa como tu en un tema dado. Yo no lo he hecho contigo, aunque creas que lo mio es un monólogo de besugo bipolar.

5.- No sigo a Rahola. Ni ahora ni antes. Como todos, algunas veces creo que tiene razón y otras no. ¿No distingo grises?, pues aquí tienes uno tirando a marengo. Aunque tu no lo veas. Y hay muchos otros que se te escapan mezclando a Rahola, Losantos Pedro J. y a mi en un solo saco. Como ya te dije burdo, burdo, y sobre todo demagógico muuuuy demagógico. Pero es lo que teneis los políticamente correctos de postal en colorines del pais de la piruleta.

Ahora me leeré el resto con mucho gusto.

Néstor ha dit...

Como no se quién eres... te explico, en Medellín es necesario el Pink Taxi... por el paseo millonario, que posiblemente no te sea cotidiano...