Diva Forever

dimarts, de maig 22, 2007

Cuando su voz irrumpe con sonora profundidad e inigualable poder de seducción, ya sea en la tensa oscuridad o a través del velo acuoso, nadie imaginaría que ese menudo y grácil cuerpo tiene sorpresas más grandes y gratas que brindar.

Con embriagadora generosidad da todo de sí, no solo a sus más cercanos amigos sino a trashumantes habitantes de la noche.

Durante muchos años eludió las candilejas de la farándula para labrar una fulgurante carrera en el alto management, no sin esporádicas incursiones como solista con un fondo de Chelo.

Ha sido sólo después de su exitoso dueto con un artista de la altura de Alejandro Sanz, y del estelar trío en el que se codeó con Bob y Frank, que decidió dar rienda suelta a su más arraigado y oculto sueño.

A caballo entre Europa y América durante los últimos meses, y bajo el más estricto secreto, estudió con detenimiento la técnica vocal, la expresión corporal y las extraviadas vidas de sus más dipsomanas divas para seleccionar la que mejor podría encarnar.

Maria Callas
requería rinoplastia. Renata Tebaldi limitaba el repertorio y el público. Judy Garland obligaba a depilarse y a estar pendiente de las trenzas. Berenice Chavez, a dejarse la papada. Liza Minelli abandonar AA. Marbelle Dietrich, implicaba todo tipo de alergias, a la lycra o al marabú, para empezar. Ella Fitzgerald, suponía una overdose de autobronceador y un papayaso inmenso. Chavela Vargas demasiado macha y limitaba la creatividad en el diseño del vestuario a cargo de la Zoilette.

Hasta que llego a Edith Piaf y este camaleón humano encontró el glamour, la voz, el desgarrado sentimiento y la identificación plena. He aquí el magnifico resultado en exclusiva para Wired:


Nota: Esta República desea que uno de sus más connotados Faunos conquiste el éxito en esta nueva etapa profesional y le sugiere que, por favor, no se le vaya ocurrir hacer un dueto con Celia Cruz, eso no se le hace a las amigas.

Imprímase y cumplase