Parte 3 de 3

Señores: Se han reiniciado negociaciones con los japoneses para la venta del país, tal y como mi maestro de literatura lo deseó hace ya algunas décadas.

No ha sido fácil retomar las negociaciones, sobre todo después un pequeño problema lexicográfico con aquello de Zip y Zape, Zipa y Zaque, y Sake, pero todo ha llegado a buen puerto y estas son las condiciones de la negociación:

1) Los japoneses se comprometen a dejar de cazar a los ballenatos y sus padres. A cambio aniquilarán al vallenato de la faz de la tierra.

Sabemos que es una perdida de patrimonio cultural, pero la humanidad entera agradecerá más el dueto de Martha Sen con los ballenatos del pacífico colombiano que una puya entre Diomedes Díaz y Julio Iglesias.

2) El país se entregará completamente vació de Colombianos. Los ojirasgados con su milenaria sabiduría y finas maneras han detectado que el principal problema del país son precisamente los colombianos.

3) Los expatriados, exiliados, desterrados, fugitivos y emigrados presentes y futuros no podrán volver a vivir en Colombia. Eso sí, se les exigirá visado. ¿faltaba algún país que no lo hiciera?

4) El vendedor se compromete a que el procedimiento de desalojo se ajustará a la legalidad y a la cultura propia del país, sin acudir a mecanismos exteriores.

Así, la estrategia de desalojo se ha inspirado en lo propuesto por Fernando Vallejo en Los Días Azules, pero con una pequeña diferencia, en vez de legalizar el robo, se legalizará el asesinato de homosexuales. Se procederá así:

a) Con ponencia de Enrique Gómez Hurtado, se presentaría un proyecto de ley que lo no solo no pene la matanza de maricas, si no que la premie.

b) La bancada liderada por Carlos Corsi Otalora y toda la pléyade de doctos congresistas que ya habían hundido el proyecto de parejas del mismo sexo, con frenético entusiasmo aprobarán ésta enmienda al Código Penal de forma preferente.

c) El juris-prudente Ministro Fernando Londoño Hoyos y el Superpresi Uribe estarán tan prestos a ratificarla, como estuvieron decididamente en contra de la ley de parejas del mismo sexo hace un par de meses.

Su argumento será el mismo: este tipo de relaciones son inconstitucionales. Si se les han negado algunos derechos ciudadanos, esta ley corta el mal de raíz: Sin ciudadanos no hay derechos ciudadanos que se vulneren.

d) Para contar con el apoyo de Bush, Aznar y Berlusconi, a los homosexuales el gobierno los declarará terroristas, ya que con su comportamiento evitan la multiplicación de la especie WASP, dejándola a merced de árabes, asiáticos y negros que en eso de reproducirse no se cortan.

e) El superpresi Uribe regañará a las ONG`s que protesten, sobre todo porque no se sabe que endemoniados seres están detrás, precisamente ¡por detrás!, de estas organizaciones.

f) De forma democrática y farandulera se seleccionará un único aniquilador a través del reality show GRAN HP. Candidatos para entrar en el “campamento” hay muchos, pero se prevé que la final sea entre Carlos Castaño y el Mono Jojoy. El premio final incluye el perdón anticipado a través de la ley de alternatividad penal.

g) Se establecerá un periodo de gracia de 24 horas para que todos los gays del país se refugien en Beach Miami, en el Village Newyorkino, en el Barrio Castro de San Francisco, en la madrileña Chueca y en el Gaieixample Barcelonés.

h) En la primera fase el aniquilador acabará con la comunidad MLBTC (Maricas, Lesbianas, Transexuales, Bisexuales y Curiosos), contando con el apoyo o indiferencia del resto de colombianos.

i) En la segunda fase el aniquilador eliminará a cacaos como Julio Mario Santodomingo, con la clavada que le pegó a los cafeteros con lo de Aces no hay duda de sus verdaderas inclinaciones.

j) En la tercera fase se acabará con toda la clase dirigente (presidentes y ex-presidentes, ministros y ex-ministros) por ponérsele en cuatro a los gringos y abrírsele de piernas a los cacaos.

k) La cuarta fase se dedicará a los deudores del Upac por haberse dejado clavar de forma tan marica.

l) La quinta fase, la más sangrienta de todas, se dedicará al resto de colombianos por haberse hecho los maricas y no haber evitado que entre los cacaos, los políticos, los guerrilleros, los paramilitares, los narcos y el resto de “vivos” hayan echado a perder al país más hermoso del mundo.

A estas alturas nuestro eficiente y profesional aniquilador habría terminado con toda la población del país. Ahora queda deshacernos de él. ¿Cómo?, se preguntarán Ustedes.

Fácil, se suicidará, ya que recordará lo que dijo uno de los gays exiliados al salir del país:

¡Marica el último!

Imprímase y cumplase